El vinagre balsámico de Módena es un ingrediente de primera. Destaca por su versatilidad, ya que encaja con cualquier plato que te puedas imaginar. Esto es así gracias a sus sorprendentes características, gran sabor y diferentes beneficios para la salud. Si quieres aprovecharlo al máximo, la siguiente receta te conquistará.
Ensalada de fresas con albahaca
El verano está a la vuelta de la esquina y ya apetece degustar algunos platos fríos y ligeros. La ensalada no puede faltar y qué mejor manera de elaborar una que incluyendo fresas. Disfrutarás de su gran sabor y toque dulce, además del que aporta el vinagre. Este es un plato que te dará para repartir entre dos y tres personas y que se realiza en tan solo diez minutos. No obstante, es posible dejarlo descansar durante una hora para potenciar los sabores.
Ingredientes
Estos, obviamente, pueden ser más o menos en función de los comensales:
- 200 gramos de fresas sin pedúnculo y que estén maduras.
- De diez a doce hojas de albahaca frescas.
- 125 gramos de queso mozzarella.
- Una cucharada de miel.
- Sal al gusto.
- Vinagre de Módena
- Opcional al gusto: Tomate de Ensalada y espinacas
Elaboración
Toma nota de los siguientes pasos:
- Empieza por lavar a fondo las fresas para quitarles cualquier resto de suciedad. Además, si hay alguna con pedúnculo, no dudes en quitárselo. Así, no te encontrarás sorpresas cuando estés frente al plato.
- Cuando tengas las fresas listas, resérvalas. Coge un bol pequeño y prepara una salsa a base de miel y de vinagre balsámico. Basta con integrar ambos ingredientes en una mezcla homogénea.
- Corta las fresas a la mitad y vete colocándolas en el plato que vayas a utilizar. A la hora de disponerlas hay total libertad, así que deja volar tu imaginación para sorprender a los comensales.
- Tras el paso anterior, corta las hojas de albahaca en juliana y distribúyelas por los platos que sirvas junto con el queso mozzarella. Luego añade sal y pimienta al gusto para potenciar el sabor de los alimentos.
- Por último, vierte la mezcla de vinagre y miel sobre la ensalada haciendo un giro serpenteante.
¿Por qué utilizar vinagre balsámico?
No solo es un producto versátil, sino que está elaborado de manera tradicional y a través de un proceso de envejecimiento de 12 años. Esto hace que tenga un sabor agridulce y un aroma que resulta muy complejo. Encontrarás notas ácidas, pero también algunas dulces que te cautivarán. Así, al añadirlo a la receta, llenarás de complejidad el plato que has elaborado.
Con el vinagre balsámico de Módena puedes crear una amplia variedad de recetas. Esta de fresas con albahaca es un ejemplo muy sencillo de la capacidad del producto. Si quieres disfrutar de todo su potencial, no dudes en combinarlo con otros alimentos, desde carnes a pescados.